martes, 28 de febrero de 2012

Ausencia obligada.

Debo pedir disculpas a mis fieles seguidores, por haberme ausentado estos días, pero ha habido motivos de peso. Por un lado, he de comentaros que alguien se me adelantó estos carnavales y puso en práctica el segundo método para acabar con la humanidad (garrafón) y, por desgracia, fui su víctima. Sin embargo, no consiguieron acabar conmigo, y como lo que no mata, engorda (en este caso engordó mi hígado), para este jueves, me encontraba casi, casi en mi mejor forma (esto no quiere decir que sea una buena forma) y me acerqué al ordenador. Cuando me disponía a escribir una maravillosa entrada, me abordaron (cañonazos incluidos) Harpo y Kennedy, para darme una pequeña sugerencia que creían me iba a gustar, seguro.
Así Harpo empleando su grandilocuencia y Kennedy haciendo uso de su increíble talento político... me dieron una brutal paliza, para posteriormente atarme a una silla. En un principio, lo asumí, como algo normal, todos sabemos, cómo son los jóvenes de hoy, que aprenden todo de la tele; y teniendo puestas las noticias, con todo este asunto de Valencia...
A decir verdad, gracias a las consecuencias de la ingesta de Ron Drugal y Poca- Cola los días anteriores, no noté más dolor del que ya me producía seguir respirando. En cambio, lo de que me atasen ya me jodió (perdón por la palabra) un poco más. Me tuvieron atado un par de días, creo, antes de darme una explicación. Calculo los días por las veces que me tuve que mear encima, que fueron unas diecinueve; cuando normalmente no me meo encima más de diez veces, en un día normal. A pesar de mis cálculos, me extraña que en esos dos días no se pusiera el sol... 
Como decía, en algún momento, volvieron a aparecer. Harpo portaba una lata de gasolina y una enigmática sonrisa. Ambas en la mano. Kennedy tenía serio semblante. Hasta el agujero de bala parecía serio.

-Piensas colaborar- dijo John.
-Claro- respondí.- ¡Joder!- añadí después de recibir un sonoro sopapo.
- Tranquilo, Harpo - dándome otra torta.
- Que voy a colaborar...
- Bien- y torta de propina.

Entonces  Marx salió de la habitación corriendo.

- Bien - apostilló de nuevo, sin venir a cuento, kennedy. Soltándome una ostia que me tiró a mi y a la silla.
- Dejafme en paf- dije escupiendo mis propios dientes..
- Bien. Pero es una fieshta- dijo, burlándose de que no podía hablar al faltarme las dos palas. Y me levantó del suelo.

El suelo tembló. En el charco de orín que tenía debajo se hicieron unas ondas.

(Iba a poner un vídeo del vaso de Jurassic Park, pero lo lo más parecido que he encontrado es esto:













no comments)


Por la puerta entró Harpo corriendo, y me estampó violentamente una tarta en la cara.

Nos reímos los tres.
Yo lloré un poco por dentro. Kennedy me volvió a atizar, por si las moscas. Él lo llama ataque pervertido.No me atrevo a corregirle.
Harpo se comió la tarta de mi cara, imitando a un perro.
Pasaron los minutos en silencio.
John me dió una hoja, para que la leyese, diciendo que esas eran sus exigencias. Se enfadó, porque no la cogí con las manos (estaba atado a una silla). Harpo la recogió del suelo, le echó sal y se la comió.
Otro silencio extraño.
Por fin, se decidieron a explicarme sus exigencias. Todo lo del fin de la humanidad les parece muy bien, pero creen que he de hacer alguna excepción. No les vale con salvar a mis lectores y fans (los dos xD). Quieren que haga una lista de famosos/conocidos que por méritos propios, merezcan ser salvados.
Pensé en negarme, en mantenerme en mis trece. En ese momento, sonó el timbre del horno. Parecía que habían hecho otra tarta.
- De acuerfo. 

Así que a partir de hoy, a parte de motivos y maneras de acabar con la humanidad, tendremos también una lista de libres del holocausto. Atentos por si aparece vuestro nombre.


Si has llegado hasta aquí, te dejo una propina.



Sí. Es el auténtico GafaPastaMan:

El super....
 hmm no tengo muy claro si es un héroe o un villano. Solo sé que lucha contra todo, lanzando discos de los Who.  A ver si entre todos descubrimos contra qué lucha; porque lo que es empeño, pone mucho. Lo único seguro es que no lucha contra su Ego.
Y ya que hablamos de los who:

No soy muy fan, pero ahí se quedan.






No hay comentarios:

Publicar un comentario